Elena Espino: “La educación no es solo un derecho, sino también un pasaporte al desarrollo de la sociedad”

La concejala de Cultura del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana informó que más de 400 personas han participado en los talleres y cursos de la universidad decana de Canarias


La Universidad de Verano de Maspalomas ha cerrado su edición número XXVIII con la participación de más 400 alumnos inscritos, que han participado en las 22 actividades programadas, como cursos, seminarios y mesas redondas, que se han planificado en esta edición “con el deseo de contribuir al desarrollo de una sociedad con igualdad de oportunidades y libre, porque la educación no es solo un derecho, sino también un pasaporte para el desarrollo de la sociedad”, en palabras de la concejala de Cultura del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, Elena Espino, en el acto de clausura del campus estival.

Elena Espino agradeció a todas las entidades colaboradores y a las empresas que han participado en el desarrollo del programa de la universidad decana de Canarias y la tercera más antigua de España. “Hemos tratado de ofrecer cursos y talleres al alcance de todos y todas, con algunas actividades gratuitas y otras con descuentos para personas desempleadas, estudiantes  y personas con movilidad reducida”.

La concejala de Cultura destacó que, durante tres semanas, “se han impartido diversos cursos y talleres que, un año más, destacan por su calidad y por la gran categoría de sus ponentes. Se ha podido disfrutar de una rica y amplia oferta  educativa, como los cursos de inglés y alemán, introducción a la lengua de signos o el de aprender a hablar en público”.

“Pero también hemos aprendido sobre transexualidad, masonería, cibercriminalidad, cáncer de mama, trastorno del espectro autista y paisaje aborígen de Gran Canaria, sobre todo ahora que Risco Caído ha sido distinguido por la Unesco”, concluyó, antes de declarar oficialmente clausurada la XXVIII edición de la Universidad de Verano de Maspalomas.

La XXVIII UVM  ha estado organizada por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y el Cabildo de Gran Canaria, en colaboración con otras instituciones y empresas, como Fundación Parque Científico Tecnológico, Rotary International, Asociación Chrysallis de Canarias, Casa África, Global y el grupo hotelero Gloria Thalasso&Hotels, entre otros.